LA HUACA

1979, estaba en 4to. de Primaria y por aquellos años yo podìa caminar todos los kilometros que quisiera, hoy salgo a caminar 2 km. a diario y llego a casa casi al borde del paro cardiàco.

Ricardo Perez, Emilio Castro, Wilo Vera, Alberto Leòn, Nico Otarola y yo, decidimos ir como tantas veces a deambular por las calles de San Isidro, entre otras cosas, en aquel tiempo, buscabamos cajetillas vacias de cigarros importados, latas de gaseosas(sodas) de otros paìses, y teniendo aquel distrito un sin nùmero de Embajadas, nosotros, indefensos niños, buscabamos en los basureros los tan preciados tesoros que aquellas embajadas tiraban a la calle. A veces tocabamos las puertas y pediamos "suvenirs" y casi siempre nos regalaban folletos turisticos, eran otras epocas y se respiraba cierto aire de paz y trànquilidad.

Despues de meternos a algunas casas a sacar Granadas y Pacaes y con ondas(resorteras) en mano, corriamos dejando atras cascaras y semillas, me imagino la escena y estoy convencido que debe haber sido algo patètico para los vecinos de aquel entonces, pisabamos las latas de leche gloria y hacìamos como si fueran patines...algo muy intenso.

Nos desviamos y pudimos ver a lo lejos aquella imponente Huaca al cual decidimos escalar...a la piramide subiamos por las esquinas haciendo una especie de escalera, llegabas al segundo nivel y despues subias un poco màs y llegabas a la esplanada desde donde podìas ver todo el distrito en su magnitud.

Emilio, Tito y Wilo subieron primero, despues Nico, Ricky y yo nos quedamos sacando Guayabas en el arbol que estaba a un lado de la piramide, sabìa que algo iba a ocurrir y pude ver a mis cuatro amigos en la cima, gritando y tomandose el pelo entre si.

De pronto escuchamos el sonido de un silbato y perros ladrando, "el guardiàn"!!!!! gritabamos, todos pudieron bajar a tiempo..antes de que los perros subieran por la rampa...pudimos observar que Emilio estaba inmovil sin atinar que hacer, habìa entrado en shock viendo como se le acercaban los perros..nosotros gritandole desde abajo, yo sin soltar mis guayabas, hasta que mi tierno amigo hizo la hazaña...se tiro desde aquel segundo nivel de la Huaca,,,sentado y dando botes por los escalones, creo que del susto no le doliò nada,,,para eso mis demàs amigos ya estaban por la Javier Prado...y entre risas y susto nos reunimos en el medio de dicha Avenida a mirarnos las caras que traìamos.

Eran casi las 6 de la tarde de ese viernes y nos apresuramos por que cada quien tenìa que llegar antes del "lonche". Me traslado a aquel momento y trato de seguir la secuencia como si yo fuera una filmadora,,recorro las calles con esos 6 niños, que van riendose, casi corriendo...felicidad extrema.

Cuando llegamos al Parque Castilla nos sentimos a salvo, poco a poco nos ibamos despidiendo algunos asustados y otros con hambre...El pròximo viernes despuès del colegio nos toca la reuniòn en el Edificio de Wilo, para seguir buscando nuevas cajetillas y latas y asi aumentar nuestra preciada colecciòn.

...Aùn puedo ver a Perez arrastrandose de risa al ver a Emilio casi suicidarde....