LOS CALLIRGOS CORAL

Los hijos de mi Tía Mirtha, hermana de mi Madre crecieron junto conmigo en las calles de Tupac Amaru, ahí en el glorioso Lince; desde el primer día en que estuvimos en ese Edificio hubieron muchas cosas que compartimos y deliberadamente dejamos que esas cosas se quedaran en el recuerdo de todos nosotros a manera de anécdota que mas adelante, con nostalgia y agrado, extrañariamos.

Podría decirse que mi condición de primo mayor me daba cierta autoridad para decidir en algunos juegos, yo que siempre estaba buscando deshacer cosas me divertía haciendo llorar o enojar a mis tiernos primitos.

Mi prima tenia un triciclo muy bonito, azul, con las llantas anchas, siempre los paseaba en el pasadizo del edificio donde viviamos, a veces aumentaba la velocidad y ellos se asustaban, mi tía salía y preguntaba por que estaban llorando y yo simplemente inventaba alguna explicación para que ella se tránquilizara.

Cierto día todos fuimos al parque castilla con el triciclo y pues yo monte a mi primo Marcos atrás, el y su hermano Carlos tenían unas bicicletas entonces yo llevaba a uno de ellos y Marielena tomaba la bici de alguno de mis primos. Allí daba rienda suelta a toda la adrenálina que producía la velocidad, pero aquella vez perdí el control y en una curva Marco salió volando, con la cara sucia de tierra y lagrimas regresamos a la casa y mi Tia regaño a mis primos, sé que en el fondo ella sabia que siempre era yo el culpable pero que recuerde nunca me reclamó nada.

En las Navidades, el esposo de mi Tia los llenaba de juguetes, de los mejores, esos que comprabas en la jugueteria de Oeschle, ya de adulto uno entiende esa frase tan trillada "mis hijos tendran lo que yo no tuve", pero en el caso de mi Tio Pepe me parece que se lo tomaba muy en serio por que lejos de dejar que mis primos disfrutaran sus nuevos juguetes él los guardaba para que no los descompusieran. Tengo que reconocer que el primer Ajedrez que tuve y mi único Monopolio me los regaló el Callirgos Pozo.

Poco a poco fuímos sembrando aquellas cosas que quedaron grabadas para siempre en mi memoria, cosas que pensé nunca recordar pero ahora entiendo que siempre es bueno dejar salir esos recuerdos que te hacen sentir bien y mejor aún si las compartes.

De alguna u otra forma siempre estuvimos ligados en las cosas que hacíamos, una vez fuí delegado de un equipo de futbol que ellos formaron "Club Atlético Ferretería Libertad", que fué un rotundo fracaso y para variar abandoné al equipo por tener como 6 derrotas consecutivas y por goleada.

Mi prima Marielena creyendose Yola Polastri, cantando, componiendo canciones, bailando Ballet, bailando marinera, tocando cajón, si hubiera existido Latin American Idol en ese entonces ella hubiera estado ahí.

Carlos "Huracan Harry", sudaba a montones, se le salían los mocos, comía todo lo que pasaba por su plato, a diferencia de sus hermanos, bailando negroide en aquella Kermese de su colegio.

Marcos "snoopy", su cabeza siempre fué motivo de burlas entre nosotros, siempre quería pegarle a su hermano por que sabía que su Papá lo defendería pero algunas veces Carlos se hartaba y le daba su chiquita y ahí se armaba el verdadero show.

Mi Hermano Jean me envió una foto, estan mis primos, mis abuelitos queridos, mi Tia Mirtha y yo, me he quedado observandola mirando cada detalle, recordando aquel día, aquella Kermese en invierno en el campo deportivo del barrio, sin duda es una foto que añoraba ver hace bastante tiempo, y que por esas cosas de la vida hoy tuve la oportunidad, en estos días que necesito a mis Abuelos más que nunca.

Los Callirgos Coral siempre me recuerdan con cariño y yo a ellos y cada vez que hemos podido nos acordamos a la distancia de todo esto que cuento, espero que pronto nos reunamos y disfrutemos una vez mas nuestras aventuras por las calles de Lince