...Me he despertado después de dormir placidamente 3 horas, el insomnio cada dia es más intenso y dormir 3 horas despues de un dia y medio sin hacerlo ya es ganancia.Lo primero que oigo es el grito de un vendedor de tortillas de maíz, eso que se come a diario por aqui, lo escucho y no puedo dejar esta maldita costumbre de analizar las situaciones y compararlas con algún pasaje de mi vida anterior, y volví a recordar los dias en Lince, hace mucho que no lo hacía pero creo que solo estaba en una etapa de invernación a pesar de que estamos a 49 grados de calor en este desierto de mierda.
"Revolución caliente....!" ..muchas veces escuche ese estribillo que significaba que el señor con su lamparín pasaría vendiendo algo que nunca supe como era, si era dulce, agrio o salado, siempre lo vi pasar por mi barrio, como a las 6 de la tarde, y en realidad nunca me interezó comprarle algo, es decir, era de los que cuando recibía una propina me lo gastaba inmediatamente en golosinas y figuritas de los albunes que salían...el último album que logré llenar, por cierto, fue el de ciencias naturales, mi madre me tuvo que llevar hasta la libreria Navarrete para comprar la figurita que me faltaba...y era de ese modo que gastaba el poco o mucho dinero que traía en el bolsillo, para las 6 de la tarde solo esperaba que se encendieran las luces de las calles para regresar a casa y tomar mi lonche, aparte que mi bendita madre solo me daba permiso hasta esa hora, claro, yo me escapaba y sabia que me sacarían la mierda a mi regreso...pero misio.
Recuerdo que cuando aquel moreno pasaba vendiendo su dichoso producto, lo observaba y me preguntaba si tenia exito vendiendo lo que vendía, veía como se alejaba cruzando el parque Castilla...y asi pasaron los años.
Dejé el barrio y como todos estudié y trabajé ya con la independencia económica compré todas las cosas que se me antojaban de pequeño....sublimes, doña pepa, cua cuá, coronita de maní, etc...es ridiculo pero lo hacía. Aquel día estaba en la esquina de Arenales con Julio C. Tello,,,ahi me bajaba de la combi,,,y escuche el famoso estribillo..."...azucar clavo y canela...para endulzarte la muela.." o algo así... me dije, es el momento de cumplir con este vendedor de Revolución caliente...asi que le compré una bolsita.
Han pasado los años y me he dado cuenta de que nunca olvide a este señor, ni siquiera he podido dejar de pensar en el, como olvidar al causante de que uno de mis preciosos dientes tenga una funda...un diente quebrado es lo que me gané por ser buena onda.... confiado di el mordisco pensando que se trataba de un dulce placentero...algo como un kekimotta, esas galletitas parecían hechos con piedra...."eso te pasa por comprar cosas en la calle" me dijo mi abuelita..pero cómo dejar de hacerlo si yo era el rey de los "agachados"...nunca más vi al vendedor, en aquellos tiempos pensé que había muerto....pero me han contado que por ahí anda rompiendo más muelas...sin duda lo recuerdo cada vez que tengo que ir al dentista....
...un polo a rayas...un short...mis zapatillas north star...eso traía puesto el dia que lo vi cruzar el parque y sentí como pena por el....ganarse los frijoles de esa forma...caminar mucho a veces con éxito a veces sin el.,....me importa un carajo si vende o no.....pero espero que sea eterno..mantiene vivo una tradición y hace que mis recuerdos sigan vivos como si fuera ayer cuando se me quebró la muela...
para rechinar los dientes...sí, como no?
